El año de la plaga, película basada en la novela homónima de Marc Pastor y con referencias al clásico de terror Invasion of the Body Snatchers (Don Siegel, 56), ofrece un interesante ejercicio que va entre la comedia romántica, el horror y la ciencia ficción. Con un elenco que tiene en su centro a Iván Massagué, Ana Serradilla y Miriam Giovanelli, también es un ejercicio de coproducción que implicó a España, Bélgica y México, desde la casa productora Cinema 226.
Yo trabajaba con la productora en otro proyecto y me ofrecieron dirigir El año de la plaga. Tiempo antes había entrado a una librería y vi la novela, la leí un poco y pensé que ahí había un argumento interesante para una película. Y fue curioso que al tiempo los productores me ofrecieran la posibilidad de dirigir la adaptación. Cuando leí la la novela me pareció muy fresca, había referencias que, sobre todo en nuestra generación, conocemos. Me parecía muy interesante la mezcla de géneros, tenía mucho potencial.
Para mí era un reto porque nunca había hecho en una comedia. Mis trabajos anteriores han sido más oscuros, thrillers, policiacos. Me lo planteé como una forma de salir de mi círculo de confort. Pero sobre todo, lo que más me gustó era la mezcla de géneros, el trío amoroso me parecía muy interesante y divertido. El personaje de Víctor Negro que interpreta Iván Massagué me parecía con un arco muy interesante. Y en fin, me ilusionó.
Fue una decisión más de los productores. Creo que le iba bien a la historia hacerlo así, porque ya teníamos la referencia de The Body Snatchers. Entonces creo que gana. Fue un reto mantener el pulso de la mezcla de géneros había que ser muy fino, casi un trabajo de precisión. Por eso, antes del rodaje me preparé bastante, para que no perdiera el pulso.
Los productores de México apostaron por Ana Serradilla y fue una propuesta muy interesante, estuve viendo algunos capítulos de series que ella había interpretado y veía a una actriz muy intuitiva, muy rápida a la hora de hacer suyo al personaje. Encontré a una actriz súper generosa, muy buena persona, muy profesional. Me parece que tenéis ahí un pedazo de actriz que espero que tenga más opciones aquí en España de hacer películas. Y fue curioso porque durante el rodaje, un día la frenaron varias personas, no sé si eran mexicanos o chilenos, el caso es que la reconocieron y le pidieron autógrafos; había gente a la expectativa, sabían que vino a rodar la película.
Y con Iván hicimos mucho trabajo de mesa. Él daba matices muy divertidos: dentro de esta plaga, tan oscura, lograba llevarte del drama a la comedia. Después lo ves en la pantalla grande y te das cuenta que este tío puede hacer lo que quiera. Tenía muy buena química con Ana y con Miriam Giovanelli, actriz que no muy conocida en México, pero aquí sí, y que se compenetra muy bien con el eesto de los actores y bueno.
A mí me encanta la secuencia que tiene Miriam con Iván y Ana en una cocina, pero no puedo hacer spoilers.
La colaboración con la productora fue una maravilla, todo era fácil con ellos. Lo complicado era encontrar actores y locaciones apropiadas, porque todo tenía que suceder en Barcelona, pero hicieron un trabajo impecable. Luego, todo el equipo de rodaje fue de México. Los jefes de equipo eran de acá, pero el resto del equipo eran de México y la verdad que muy profesionales. Y disfruté mucho el trato con los productores mexicanos. Todos, gente súper inteligente y con criterio. Fue una experiencia muy positiva, aprendí mucho de ellos y me acogieron bien. No tienen nada que envidiarle a producciones de otros países.
La diversidad en la producción aporta muchísimo, pero eso sobre todo te lo pide la historia. La historia si te dice si hay la posibilidad de coproducir, lo lees y sabes que para financiarla bien se puede hacer una coproducción con diferentes países y sin problemas se podría ejecutar. Es la historia la que lo manda. Siempre se puede jugar a intentar montar el puzzle y es muy rico tener esa opción de trabajar con profesionales de otros países.
La película ya tiene unos cuatro años de estar haciendo recorridos de exhibición, ¿cómo ha sido su retroalimentación?
En España fue una distribución muy selectiva, no fue una película de 300 copias, la gente me decía que se divertían, les parecía muy interesante la mezcla de géneros, los actores les gustaban mucho también. Es una película para pasar el rato, no va con más ambición, creo que es mucho intentar que el espectador pase un rato divertido, que se ría con se ríe cuando tiene que reír, que se emocione cuando toca. El feedback ha sido positivo, a ver qué tal le va en México.
El año de la plaga (España, Bélgica, México, 2019). Dirección; C. Martín Ferrera. Guión: Ángeles Hernández, Miguel Ibáñez Monroy, David Matamoros y Marc Pastor, basado en la novela homónima de Marc Pastor. Productores: Samantha Guillén, Ángeles Hernández, David Matamoros, Peter Rogiers, Adrián Bazán, Francisco Villareal, Antonio Nava. Compañías productoras: Zentropa Interntional Spain, Neo Art Producciones, Televisió de Catalunya-TV3, Casa Kafka Pictures, Cinema226. Fotografía: Miquel Prohens. Edición: Elena Ruiz, Ana Charte Isa. Diseño de producción: Eva Calviño. Sonido directo: Agost Alustiza, Jorge Juárez. Diseño sonoro: Wouter Beckers. Música: Alfonso “Poncho” Toledo. Reparto: Iván Massagué. Ana Serradilla. Miriam Giovanelli. Silvia Abril. Brays Efe. Canco Rodríguez. Juanra Bonet. Amparo Moreno. María Molins. Fermí Reixach. Natalia Sánchez.