Entiendo que esta película está basada en un libro de Hortensia Moreno que lleva el mismo nombre. ¿cómo llegaste a este libro y qué te hizo decidir que era adecuado para hacer una película?
El libro de Hortensia Moreno me llegó a través de mi suegra. Ella tiene un programa llamado "Pequeños Grandes Lectores", para que los niños lean libros y participen en un concurso. Lo hace en Sonora.
Mi suegra me dio este libro y desde el título me pareció diferente e interesante. Me recuerda los años ochenta, las películas de Chabelo y El Santo, este tipo de aventura muy mexicana.
Le agregué toda la influencia que traigo del cine que me gustaba de niño, las películas de Zemeckis y Spielberg, quise darle esa vibra. Pero lo que me pareció muy interesante fue cómo esta historia incorpora el terremoto de 1985 de una manera muy orgánica, sin tener que enfocarse directamente en él. Es un evento trágico y se aborda como parte de la historia. Me pareció fascinante, algo muy lindo.
Contacté a Hortensia, que es una maestra de la UNAM, y no podía creerlo cuando le mencioné el libro, porque lo escribió hace tiempo. Cerramos los derechos y adapté el libro a un guion cinematográfico.
El libro es un cuento de poco más de 50 páginas. Lo que hice fue extenderlo a 110 páginas, metiéndole esta historia de amor entre Jimena y Nicolái, y algunos elementos cinematográficos.
Aplicamos a EFICINE y tuvimos la fortuna de que fuera aprobada. Todo esto que te conté ocurrió en seis años.
En El extraño caso del fantasma claustrofóbico aborda el rescate de la memoria. No sé hasta qué punto también consideraste esta conexión entre los fantasmas y el terremoto.
Es algo que me encanta porque al incluir un elemento histórico, la película cruza esa línea en la que se mezcla la realidad y la ficción. Al final, la realidad y la ficción se entrelazan. Forrest Gump funcione por eso. Aunque es un personaje ficticio, proporciona una justificación perfecta para hablar de la historia de Estados Unidos. Esto le da un toque muy real.
Los protagonistas de tu película son tres chicos adolescentes, que están en esa etapa complicada. Tanto Lucas, Emilia y Fausto, por mencionar a los principales. Quería preguntarte cómo trabajas con un crew adolescente.
Lo primero que tuve que hacer fue recordar cuando yo tenía esa edad, para poder entender su perspectiva. A esa edad, el presente es lo más importante y no se piensa mucho en las consecuencias a largo plazo. Fue difícil acercarme a ellos, entenderlos y ser un amigo, pero al mismo tiempo mantener un ambiente de respeto, porque sin eso no se puede trabajar.
Tuve la suerte de trabajar con tres chicos muy profesionales. Ana era su primera vez actuando en una película, pero lo hizo muy bien. Contamos con un coach de actuación que les ayudó a comprender la historia de sus personajes más allá de los diálogos.
Realizamos ensayos y trabajamos en que entendieran quiénes eran sus personajes. Sin embargo, el reto siempre está presente con los adolescentes, ya que pueden perder el enfoque rápidamente y repetir tomas puede complicarse. Es importante saber cómo justificar la repetición y comunicar claramente el motivo, para evitar que se convierta en una falta del diálogo.
¿Y qué me dices de los efectos especiales? Los momentos más interesantes son cuando aparece el fantasma y la habitación se llena de azul, pero en particular me encantó la escena en la que Nicolai tiene una conversación con Poncho, en ese lugar desolado y que Poncho aparece y desaparece.
Fueron varias personas las encargadas de los efectos especiales. Uno de ellos es Jorge Carbajal, el supervisor de todo y también trabaja con nosotros en Zula. Originalmente, teníamos la idea de crear una pequeña piscina que simulara un espejo de agua. Pero tuve un dilema moral y pensé en la cantidad de agua que se desperdiciaría, alrededor de 20,000 litros. Decidí que no era una opción viable, sobre todo considerando el problema del agua en esta ciudad. Así que buscamos una solución alternativa.
Lo que hicimos fue supervisar un equipo de cinco personas y cámaras con movimientos precisos, utilizando una grúa. El actor llevaba un traje verde y se desvanecía gradualmente para desaparecer. Tenía en mente la idea de una gorra flotante, algo que me gustaba mucho. Además, contamos con la ayuda del maquillaje de Poncho. Al final marcamos todo el suelo con puntos para hacer el seguimiento y poder crear el efecto del espejo de agua. ¿De dónde vino la inspiración? Bueno, hay una película que me encanta llamada "Under the Skin" de Jonathan Glazer, con Scarlett Johansson. Interpretando a un alienígena que recluta hombres y los lleva a un lugar oscuro similar a un lago. Esa idea me inspiró para recrear este lugar en el limbo, ya que el fantasma se encuentra en ese estado intermedio entre su clóset y el cielo, por así decirlo.
¿Qué te parece la idea de presentar en Guanajuato y ser parte de la selección?
Le tengo mucho cariño a Guanajuato. Mi ópera prima, la presenté allí y se llama Casi 30. Ya han pasado diez años desde entonces, y será muy curioso porque la presenté el 21 de julio 2013 y ahora voy a presentar esta película el 21 de julio de 2023. Entonces hay que comprar un cachito con el 3, pero es muy interesante. Son diez años exactos y me encanta. Conozco a Sara, a Nina y a todos. Es padrísimo poder regresar ahora a León, San Miguel e Irapuato.
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