También ha sido un año de inquietudes que es necesario aclarar: desmontar mitos que se han establecido en la opinión pública, y que no siempre reflejan con exactitud el momento que está viviendo el cine de nuestro país.
¿Cómo ha sido el año 2022, y los últimos años para el cine mexicano? ¿Qué mitos se han creado y cómo podemos confrontarlos con la realidad de las actividad del gremio cinematográfico en México?
Los apoyos al cine nunca se interrumpieron, ni durante el peor momento de la pandemia. Fueron un factor decisivo para la pronta reactivación del sector cinematográfico. Entre las 20 convocatorias anuales que realiza la Secretaría de Cultura, vía el IMCINE, el Gobierno de México destina cerca de 900 millones de pesos, año con año, al fomento y crecimiento del cine mexicano.
Según el Anuario Estadístico de Cine Mexicano 2021:
En realidad, los apoyos que el sector público otorga al cine mexicano se han mantenido y, más importante: se han diversificado. Ahora contamos con 20 convocatorias anuales, las cuales abarcan todas las áreas del proceso cinematográfico: formación, guión, producción, postproducción, distribución, exhibición y preservación. Además, con una enérgica apuesta a temas, tratamientos y equipos de trabajo diversos, plurales, incluyentes, con equidad de género y que se forman y consolidan en todo el país.
FOCINE, programa presupuestario de subsidios, sustituyó a los anteriores fideicomisos FIDECINE y FOPROCINE, y opera con un presupuesto anual similar al de ambos fideicomisos combinados. Para 2023 supera los $191 millones de pesos ($191,169,600.07).
Este programa de apoyos al cine mexicano cuenta con 9 convocatorias de apoyos a la producción:
1. Largometrajes de ficción
2. Largometrajes documentales
3. Largometrajes y cortometrajes de animación
4. Largometrajes y cortometrajes para niñas, niños y jóvenes
5. Cortometrajes por región
6. Largometrajes en colaboración con los Estados
7. Operas primas de escuelas de cine o con especialidad de cine
8. Postproducción
9. Cine experimental
Destaca que:
Es un estímulo para cineastas indígenas y afrodescendientes por autoadscripción. Combina estímulos económicos con acompañamiento, asesorías, talleres, y la participación del equipo de trabajo de cada proyecto en una residencia que se realiza cada año en La Albarrada, San Cristóbal de las Casas, Chiapas.
Desde este estímulo se han apoyado en promedio 15 proyectos por año, desde sus inicios en 2019. Ahora se tienen 46 películas en producción, 9 en postproducción y 3 películas terminadas y estrenadas, que viven su ciclo de festivales nacionales e internacionales.
Las películas apoyadas por ECAMC se han hablado en 33 lenguas originarias de México. Ahora está abierta su quinta convocatoria.
Para el cine comercial, industrial y de autor, este estímulo opera desde 2007 a través de un Comité Interinstitucional en el que participan la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHyCP), el Servicio de Administración Tributaria (SAT), la Secretaría de Cultura y el IMCINE.
Cuenta con un monto de 650 millones de pesos anuales, divididos en dos convocatorias al año. Las empresas contribuyentes interesadas en apoyar al cine mexicano desde este estímulo pueden aportar hasta un 10% de su ISR a los proyectos cinematográficos calificados favorablemente.
Desde 2021 se lleva a cabo en dos etapas:
1) Evaluación cinematográfica
2) Evaluación fiscal, tanto de la casa productora como la empresa contribuyente
Con este cambio, EFICINE garantiza que los proyectos cinematográficos accedan al estímulo por su calidad y viabilidad; esto ha duplicado y diversificado la participación de proyectos. También se ha avanzado en la descentralización del estímulo, aunque aún queda mucho camino que recorrer.
Se apoyan todas las propuestas. Para el IMCINE es fundamental, no solamente la cantidad y variedad de la producción cinematográfica en México, sino también la calidad de las producciones. Por eso apoya las distintas aristas del cine, desde sus vertientes más tempranas de creación y formación, que consolide a mejores profesionales en las distintas aristas del quehacer cinematográfico.
Desde esta óptica, IMCINE mantiene estímulos para áreas creativas que se articulan con los procesos de producción. Estos apoyos son:
Estímulos económicos que operan como convocatoria abierta desde 2001. Se seleccionan en promedio 40 proyectos cada año, y reciben un estímulo de entre 80,000 y 100,000 pesos en escritura y hasta 150,000 pesos en desarrollo.
Es un concurso de guiones escritos por mujeres y mujeres trans. Se da un estímulo económico de $50,000 a los guiones ganadores y se organizan encuentros de las guionistas con productoras y productores interesados.
El Estímulo para la formación audiovisual independiente (AEFA) se creó hace 2 años, a partir de los encuentros que realiza el IMCINE con colectivos en el país, con el fin de estimular el desarrollo de iniciativas de formación audiovisual no escolarizada.
Desde el EFAI se han apoyado 23 colectivos de formación audiovisual en 14 estados del país: Oaxaca, Aguascalientes, Guerrero, Nayarit, Puebla, Chiapas, Veracruz, Tlaxcala, Yucatán, Hidalgo, Estado de México, Michoacán, Querétaro y Coahuila.
Además de las convocatorias para producción, Focine ha lanzado tres convocatorias más: dos que atienden a la exhibición, desde la equipación y la formación de audiencias, y una más de preservación de acervos, que apoya la creación, profesionalización, consolidación y divulgación de archivos y proyectos audiovisuales que se han realizado en todo el país.
1. Equipamiento y adecuación de salas de cine, espacios de exhibición independientes y cines móviles.
2. Programas de cine mexicano y formación de públicos.
A través del FOCINE, en 2021 se apoyaron 32 proyectos en la modalidad de formación de públicos y exhibición de cine mexicano, y en 2022 se apoyaron 29. También se han apoyado proyectos para equipamiento y acondicionamiento de espacios de exhibición y cinemóviles: 13 en 2021 y 13 en 2022.
En sus 2 años de funcionamiento, FOCINE ha apoyado con subsidios a 45 proyectos en 2021 y 42 proyectos en 2022.
Estos apoyos, en sus dos modalidades, han tenido impacto en los 32 estados del país.
Cuenta con un monto de 50 millones de pesos anuales, divididos en dos convocatorias al año.
Por muchos años funcionó como estímulo para estrenos comerciales. Desde 2021 se diversificó para estimular dos modalidades más: circuitos culturales de programaciones de cine mexicano y circuitos mixtos; esto es, con funciones gratuitas y con boleto pagado.
Da apoyos a proyectos de preservación, rescate, restauración, digitalización, limpieza, catalogación y conformación de acervos cinematográficos y audiovisuales en diferentes formatos y soportes, en todo el país. Tiene dos objetivos: 1) contribuir a preservar el patrimonio cultural audiovisual de México, y 2) llevar un registro puntual del mismo, sin afectar los derechos patrimoniales de las personas y entidades.
En estos dos años se han apoyado proyectos como el acervo de Paul Leduc, el legado de animación de Dominique Jonard, el rescate y restauración de cine de luchador@s de los años 70, el acervo del Colectivo Ojo de Agua, el Archivo Lilly con materiales en 16 mm de la comunidad wixárikas, la digitalización de películas de Estudio México Films, la restauración de El Bulto y Víctimas del pecado, el archivo del Canal 6 de julio, el archivo de ProMedios en Chiapas, y más.
El cine mexicano aun tiene retos importantes pero está listo para enfrentarlos. Hay un andamiaje amplio, incluyente y seguro, que busca acompañar todas las expresiones audiovisuales posibles que ocurren en nuestro país.
2023 se anuncia como un año de historias plurales y vigorosas, que serán reflejo de la diversidad y la energía de todo el territorio nacional.