‘Celeste Soledad’, de Alex Argüelles: dos hermanas, una casa, sus fantasmas

Inicia como una amable comedia familiar: los padres progres, la hija artista, la otra hija que va a la deriva con ánimo parrandero. Pero los padres mueren mueren en un accidente automovilístico y las hemanas deben salir adelante por sí solas. La película va asumiendo tonos graves, hasta llegar a zonas inhóspitas.

 

Celeste Soledad, ópera prima de Alex Argüelles, cuenta la historia de dos hermanas con distintas personalidades, que antagonizan pero también se complementan. Dos fantasmas que deambulan por una casona solitaria, una buscando el menor momento para evadirse, la otra tan concentrada en sí misma que no puede evitar el diálogo con sus manías y sus monstruos.

 

Celeste Soledad tendrá su estreno en el 37°  Festival Internacional de Cine en Guadalajara, en la sección Premio Mezcal.  Platicamos con Alex Argüelles sobre su primera película

 

¿Cómo inicia la idea de Celeste Soledad?

El primer boceto surgió basado en experiencias de la que entonces era mi novia, con temas que me importan mucho, como un tipo de soledad en la que todos estamos atrapados y las formas que tenemos de relacionarnos para mitigarla. Un libro que me inspiró para el guión, 10 posibles razones para la tristeza del pensamiento, de George Steiner, dice que el amor más profundo es una conciliación nunca concluyente entre soledades. Todos estamos en nuestras cabezas solitos y tratamos de mitigar esa soledad en la unión con nuestros seres queridos.

Entonces surgió esta idea de qué pasaría en una historia entre dos hermanas que se odian y ven el mundo de forma diferente, pero sólo se tienen la una a la otra. Y en el caso de Soledad, tiene una percepción del mundo diferente, que la lleva a recuerdos muy oscuros. 

Fue un proceso largo, en 2012 empezó a maquilarse y hasta 2018 tuve el guión terminado. Tuve la la oportunidad de escribir con mi colega Emilio Aguilar Pradal, también director de cine y de mi misma generación del CUEC, ahora ENAC. 

 

Celeste Soledad inicia como comedia familiar, sigue a una suerte de melodrama, después se dispara a otra cosa. Hay un juego interesante de cambio de tonos.

Esa idea estuvo desde el principio. Quería jugar con los géneros, que en principio no me molesta que sea una película de género. La idea viene de Come and see de Elem Klimov y también está inspirada en Mártires de Pascal Laugier, donde hay estos cambios de historia. 

Me gusta poner al público en la misma situación que están los personajes: primero Celeste y Soledad están en esta burbuja de la seguridad del hogar, y cuando llegan al mundo adulto se dan cachetadones porque el mundo no te protege como tu familia. Cuando se pierde esa protección empiezan a explorar cosas que antes no podían; ahora no hay alternativa porque tienen que sobrevivir, cada una por su camino, aparentemente en direcciones contrarias. Inevitablemente van a tener que unir sus soledades. 

 

Parte de la eficacia de esta película tiene que ver con sus dos actrices, Michelle Betancourt y Fernanda Echevarría del Rivero. ¿Cómo trabajaste con ambas?

Las dos son actrices fantásticas y sorprendentes. Yo quería trabajar con ellas antes de tener el final de la historia. De hecho, escribí el guión con ellas en mente y fue muy interesante, el simple hecho de pensar en ellas hacía que los personajes ya existieran, y más que inventar era ir explorando y quitando tierrita. Daba la impresión de que la historia estaba ahí, que sólo la tenía que descubrirla.

Fernanda es mi prima, la conozco desde siempre. Y a Michelle tuve relación con ella desde antes de escribir la película, entonces hay cosas de ambas que están en la película y que ellas identificaron. Son muy observadoras y perspicaces y lo entendieron a la primera, entonces mi trabajo en el set era hacer la escena que ellas ya había leído, un ensayo, trabajar detallitos, todo muy natural. 

Fue trabajo de platicar y platicar el fondo de las cosas.Algo que aprendí es que como director hay que hacerte de aliados, más que explicar lo que tienen que hacer. Tienes que compartirles lo que te importa sobre el proyecto, estar en el mismo canal y luego dejarlas ser creativas, porque estás trabajando con gente creativa.

 

 

También sobresale el diseño de producción. De nuevo jugando con los tonos, juegas con una bonita casa coyoacanense de manera interesante. Esta ambientación determina lo que hacen tus actrices. ¿Cómo fueron creando este espacio?

Vengo de una escuela en la que no sabemos de dónde vamos a sacar dinero, entonces van surgiendo estas circunstancias. La casa es un personaje común en las películas de bajo presupuesto, como mi película. Cuando la escribí, pensaba en que fuera algo que pueda producir, y es lo que la mayoría hacemos: que ocurra la mayor cantidad de cosas en un espacio controlado, una casa o un departamento. Antes tuve esta experiencia al trabajar en Nocturno de Luis Ayhllón, ahí fui fotógrafo, y también he estado en otros proyectos donde eso ocurre, un fenómeno súper interesante: cómo tus circunstancias de presupuesto influyen, pues mejor escribo para que ocurra la mayor cantidad de cosas en una locación, y esa locación se vuelve un personaje.

Yo tenía esta idea del color: Soledad está relacionado con el amarillo y Celeste con el azul, y las atmósferas con la iluminación de César [Gutiérrez Miranda], el trabajo de arte de Elisa [Adame] y el diseño de vestuario de Mariana Gandía fueron creando esta atmósfera. 

Al principio la casa se ve más brillante y poco a poco se va volviendo sombría, con colores más atrevidos. Los colores vienen de los tonos de las paredes, pero conforme se va distorsionando la realidad hay luces rojas, azules; violentas, diría yo.

 

Celeste Soledad, Dir. Alex Argüelles

 

¿Qué te parece estrenar en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara ?

Estoy feliz, todo ha sido una serie de gratas sorpresas y felicidad. Uno hace todo su esfuerzo para levantar sus proyectos, te das muchos topes, te frustras, muchos trabajos se caen, y de pronto, cuando me dieron el apoyo de Foprocine fue la primera gran sorpresa. Guadalajara es el festival de cine más antiguo del país, un festival enorme. Que el jurado decida que tu película va a estar, que coincida su visión del cine con la tuya es un gran honor para mí. 

Celeste Soledad (México, 2022). Dirección: Alex Argüelles. Guión: Alex Argüelles, Emilio Aguilar Pradal. Producción: Paola Rivera Pérez, IMCINE - FOPROCINE, Diva Films. Música: Alex Argüelles, Adrián Echevarría Harris. Sonido: Daniel Rojo, José Miguel Enríquez Rivaud. Fotografía: César Gutiérrez Miranda. Edición: Francisco X. Rivera. Dirección de Arte: Elisa Adame. Reparto: Michelle Betancourt, Fernanda Echevarría Del Rivero, Claudette Maillé, Diego Jáuregui, Pablo Marín, Miguel Jiménez, Karina Gidi.