Inspirado en las prácticas de vuelo libre que se realiza en las regiones de El Peñón y Temascaltepec, en el Estado de México, Alejandro Blázquez realiza su ópera prima, que apuesta por el coming of age y la aventura. Caballero Águila recrea una población y sus habitantes, un deporte de riesgo extremo y prácticas criminales no menos audaces, para plantear dilemas sobre la familia, el amor, la amistad y, finalmente, esa tensión irremediable de crecer.
Con un elenco que pone al centro a José Pescina, María Cid, Jorge Guerrero y Américo Hollander, acompañados de presencias como Luis Alberti, Roberto Sosa o Gustavo Sánchez Parra, Caballero Águila es una de las grandes propuestas del fin de año cinematográfico de México.
¿Cómo se filma una historia de anhelos y desafíos desde las alturas? El director Alejandro Blázquez nos cuenta su experiencia.
¿De dónde viene tu interés por las prácticas de vuelo en parapentes? ¿Cómo decides hacer una película sobre ellos?
Cuando produje El fantástico mundo de Juan Orol tuve un evento desafortunado con un contribuyente; en un intento por distraerme aprendí a volar parapentes, pensaba que si me mataba sería el menor de mis problemas. Y hace casi catorce años conocí a la comunidad de vuelo del Peñón, en Temascaltepec, Estado de México.
Se volvió mi hobbie volar. Con el tiempo conocí a un chavo de origen rural del Temascaltepec, José Luis Jaramillo, o “Cloch” Jaramillo, quien ayudaba a los pilotos de la zona y empezó a involucrarse con el vuelo.
En 2015 fue campeón mundial; José Luis no esperaba ser campeón del mundo en un deporte de élite, me pareció inspiradora su historia. Hoy, la empresa Wills Wings, precursora del vuelo de Ala Delta, se ubica en Valle de Bravo y Cloch es uno de los principales constructores de alas.
Caballero Águila es un coming of age, sobre el destino de tres amigos que viven en un pueblo relativamente pequeño, y de ahí tienen que decidir qué hacer con su vida…
Los tres amigos deben escoger qué camino tomará su vida. En el caso de Pastor, es evidente que el vuelo libre es el camino que persigue. Nacho, interpretado por Jorge Guerrero, viene de un entorno familiar complicado y la necesidad de dinero fácil; toma decisiones que ponen en peligro su futuro y hasta su vida. Jorge hace un papel espectacular, con una sensibilidad especial.
El personaje de Américo Hollander sería el camino normal de un chavo deportista, campeón del equipo de futbol; lleva una vida balanceada, quiere ser agrónomo, es congruente con su entorno y buen amigo. Ellos tres tienen estas aventuras alrededor del mundo del vuelo.
Es una película de aventura, con sabor a película ochentera de acción juvenil. Quiere decirle a los chavos que la vida es maravillosa. Hay oportunidades de trascender, sin importar cuáles creas que son tus limitaciones, puedes volar tan alto como te lo propongas.
Hablando de volar alto, ¿cómo se filma esto? Porque tienes escenas desde el punto de vista de los personajes en los parapentes. Debe de de los desafíos más importantes de la película...
La película es una proeza técnica. No hay ningún antecedente en el cine mundial, por la complejidad de las escenas aéreas.
Temascaltepec es un lugar con las mejores condiciones de vuelo, el viento tiene una consistencia que te permite volar prácticamente todos los días del año. Llegan miles de extranjeros al año, pero cuando filmamos no había turismo, por la pandemia, tuvimos la ventaja de contar con todo el espacio aéreo para nosotros. Además, contábamos con profesionales de Valle de Bravo y Temascaltepec. Teníamos a los mejores stunts del mundo, y las condiciones meteorológicas ideales para hacer la película.
Durante la preproducción pensamos que muchas escenas se harían desde parapentes motorizados, donde puedes montar una cámara con un estabilizador. Las escenas de los actores se pensaron en blue screen para no poner en riesgo sus vidas. Pero las condiciones fueron tan buenas que terminamos haciendo la mayoría de las escenas desde parapentes en vuelo; el camarógrafo venía amarrado como pasajero con la cámara. Fue una semana de rodar las escenas aéreas, y las condiciones fueron tan buenas que ni siquiera usamos equipos motorizados. El vuelo libre fue grabado en vuelo libre.
Tienes un equipo interesante de asesores y ejecutores técnicos, pero también un elenco solvente: actores como José Pescina, Jorge Guerrero o María Cid, que empiezan sus carrera, pero también presencias con trayectoria, como Gustavo Sánchez Parra o Roberto Sosa.
Influyó el contexto del COVID. Había pocos proyectos y por eso pudimos disponer de muchos actores. Sobre todo de Roberto Sosa, un amigo entrañable que siempre me acompaña en mis proyectos. Y el maestro Sánchez Parra, que tiene una participación breve, pero importante.
De Jorge Guerrero, no conocía su trayectoria. Cuando hice el casting no había salido Roma, donde interpreta a Fermín; su prueba fue espectacular, me enamoré perdidamente de su trabajo.
A María sí la debutamos. Ella es actriz de carrera, me pareció que la chava perfecta para Flor, porque tiene esta parte natural y mexicana, pero por otro lado es muy guapa; una Julia Roberts mexicana.
Con Américo Hollander había tenido la oportunidad de jugar futbol; para mí era importante que El Chino jugara, que no fuera un actor haciendo coreografías. También están la maestra Mayra Sérbulo, Alicia Lara, Gustavo Sánchez Parra, Roberto Sosa, Rodrigo Corea. Estoy agradecido de haber contado con muchos de los grandes maestros de actuación, personajes importantes en el Centro Universitario de Teatro y con una trayectoria increíble.
Caballero Águila ya ha tenido proyecciones en festivales internacionales. ¿Cómo la han recibido?
La película se acabó en 2022 y empezó su trayectoria en festivales internacionales. Ha estado en más de 40 festivales alrededor del mundo: ha sido selección oficial de varios de ellos y ha ganado muchísimos premios.
Ganó a Mejor Película en el Festival de Cine de Sidney, Mejor película en el Festival de Cine de Washington, Mejor película en el Festival de Cine de New London y Mejor fotografía en el Festival de Cine Eurovisión de Ginebra; ha viajado por todo el mundo y sigo recibiendo correos donde me la piden. La verdad me da mucha alegría que haya esta respuesta.
No fue muy bien recibida en los festivales mexicanos, creo que un poco porque el tono es distinto; Caballero Águila es una feelgood movie y a los programadores de los festivales mexicanos prefieren el drama. Es una película de aventura que no encaja en el cine de arte. Ahora esperamos que el público decida si esta película merece crecer.
Hay un hueco en el cine nacional que deberían llenar géneros como el de aventuras que propone Caballero Águila, me parece importante que existan películas que buscan ocupar esos espacios.
El cine que comercialmente más exitoso en México ha sido la comedia y el cine de terror; suelen ser apuestas seguras. El cine de aventura, cuando se ha explorado bien, ha tenido componentes complejos como presupuestos muy exorbitantes, nos cuesta trabajo a los cineastas la parte técnica de hacer aventura sin recursos ilimitados. El cine de aventura es un género que los mexicanos terminan explorando en Hollywood, donde hay condiciones presupuestales holgadas para hacer acción. Yo se lo atribuyo a eso y a que somos azotados, como buenos latinos y nos cuesta más trabajo contar historias desde este género.
Eso hace que Caballero Águila sea una película afortunada, porque es un cine mexicano que la gente no ha visto. Para nosotros ha sido muy padre la recepción, es un retrato social con una perspectiva de una especie de superhéroe: también es un poco un cine de superhéroes. Es bonito haberlo logrado y que el público tenga esa experiencia de ver una película con un tono y un ritmo más rápidos de lo que están acostumbrados.
Esta película será un referente positivo para próximas películas que quieran hacer contenidos más arriesgados y también que la tecnología cada vez nos permite hacer posible más cosas.
Caballero Águila (México, 2021). Dirección y guion: Alejandro Blázquez de Nicolás. Producción: Alejandro Blázquez de Nicolás, Juan Carlos Sierra Niembro, Alejandra Canale Lebrija, Vanessa Lew Leicegui. Compañías productoras: Celuloide Films, El Bayo y el Gu¨iro , FOPROCINE y Hotel Austria Operadora. Fotografía: Alejandro Blázquez de Nicolás. Diseño de producción: Christopher Lagunes Villavicencio. Postproducción: Óscar Guerrero. Edición: Branko Andrés Gómez Palacio del Rio. Música: Adriana Marroquín Torres e Izcacel Pérez Pasten Serafín. Sonido directo: Enrique Domínguez Hernández y Aldo Medina. Diseño de sonido: Enrique Domínguez Hernández y Cesar González Cortéz. Reparto: José Pescina, María Cid, Jorge Guerrero, Américo Hollander, Irene Esser, Luis Alberti, Roberto Sosa, Gustavo Sanchez Parra. Locaciones: El Peñón, Temascaltepec, Estado de México.