Festival de Radio y Cine Comunitario El lugar que habitamos: experiencias compartidas de pueblos hermanos

Ojo de Agua es una organización que desde 1998 busca la defensa y divulgación de pueblos y comunidades originarias, a través de tecnologías audiovisuales. Promueven el diálogo desde la radio y el cine comunitarios. Por eso la importancia de la segunda edición de su Festival de Radio y Cine Comunitario “El lugar que habitamos”. 

En 2021 ocurrió la primera edición del festival: “‘El lugar que habitamos’ no es un festival competitivo porque no entregamos algún reconocimiento a la mejor obra; nuestro objetivo es que los autores sean verdaderos protagonistas “, comenta Paola Morales, su organizadora. Platicamos con ella y con Sergio Julián Caballero, fundador de Ojo de Agua, sobre esta fiesta de las comunidades, que comparten sueños, ideas, saberes, en búsqueda de una representación más digna y fiel de sí mismos. 

 

Cortesía: Ojo de Agua

¿De qué se trata el Festival de Radio y Cine Comunitario “El lugar que habitamos”?

Paola Morales (PM): Ojo de Agua es una organización que desde hace más de 26 años trabaja con medios de comunicación comunitarios. Nuestra labor se realiza en comunidades indígenas de Oaxaca, aunque trabajamos con comunidades de otros estados y otras regiones de Mesoamérica. 

Entre nuestras áreas principales se encuentra la producción y la divulgación de trabajos audiovisuales. Estos proyectos abarcan temas como la defensa del territorio, la diversidad de género o las infancias. Desde nuestros inicios hemos organizado muestras y proyecciones, pero hasta 2015 se creó la  muestra “El lugar que habitamos”, que acercaba al público con producciones de Oaxaca o Chiapas, hasta producciones El Salvador, Nicaragua o Argentina. 

El festival también difunde lo que se hace en la radio comunitaria: se comparten cápsulas y programas que han resultado tan exitosos como las proyecciones fílmicas. En 2021 se formaliza el festival, con una esencia cercana al activismo y de observación a los problemas de las comunidades rurales.

 

¿Cual es el alcance que tuvo este festival en su primera edición? 

PM: En 2021 el reto fue la pandemia. Una interrogante constante era si se iba a realizar este evento de forma presencial u online. Finalmente entendimos las dificultades que tenían algunos grupos para acceder a medios de comunicación y buscamos la manera de difundir la mayoría de contenidos por distintos canales. 

La importancia que también tiene el festival es que en la zona no hay otro festival de radio y precisamente impulsamos a estos realizadores. No sólo nos quedamos con la radio tradicional, también le damos importancia a cápsulas compartidas de forma digital, o formatos tipo podcast. Las producciones que han encontrado apoyo con nosotros son aquellas que no tienen un lugar en los cines de cadena o del mercado especializado, de este modo se recupera y pondera la identidad. 

Sergio Julián Caballero (SJC): Hemos intentado llevar el festival a lugares como Guelatao, el Istmo de Tehuantepec y distintas partes de la periferia, porque son lugares que generalmente se pierden de estos eventos o que les resulta difícil acceder a sus contenidos. Por esta razón ahora tendremos programas en vivo con la Universidad Autónoma Benito Juárez y en otros espacios, para compartirlos con  emisoras de radio comunitarias. 

 

¿De qué manera seleccionaron las áreas temáticas o categorías en las que se dividieron los proyectos participantes? 

PM: Ojo de Agua mantiene tres áreas temáticas: la defensa del territorio, género e infancias. Agregamos el tema de Memoria y Archivo, porque en Ojo de Agua nos preocupa rescatar y preservar el material que se ha grabado, desde que se le ha brindado el apoyo a las comunidades y sus realizadores. 

En este año, son cinco las categorías en que se puede concursar: Tierra y Territorio, Arte y Cultura, Género y Disidencias, Desde las Infancias y Juventudes y la última que es Memoria y Archivo. 

SGC: En la parte de Género hemos aprendido de bastantes compañeras, que como productoras y realizadoras han logrado un acercamiento relevante con la comunidad. Nuestras líneas de trabajo se han expandido a la diversidad de expresión de género, y ahora es posible que hablemos de realidades trans, entre otras que conforman la comunidad LGTBIQ+. Tenemos un crecimiento transversal en todas nuestras líneas de trabajo. . 

Cortesía: Ojo de Agua

La categoría de Infancias y Juventudes se conformará por un jurado de niños, ¿Cómo fue que acordaron esto?

PM: Fue una enseñanza bastante significativa de nuestra primera edición, porque entendimos que como adultos nuestra visión es diferente a ese nivel cognitivo que tiene un material producido por los más jóvenes o para los más jóvenes. Habrá algunos adultos que opinen respecto al guión u otros aspectos de forma, pero quienes deben seleccionar los proyectos son los mismos chicos. 

SJC: En esta parte trabajamos con tres espacios, como Calpulli, una organización que ha planeado la elaboración de video-cartas y fomentan la integración de los jóvenes. Es importante que algunos colaboradores adultos guíen a estos autores, pero las producciones deben resaltar esa esencia propia de los chicos. Que se escuche y se vea justamente lo que ellos y ellas quieran expresar y compartir. 

 

¿Cómo ha sido la recepción de “El lugar que habitamos” en las comunidades que han visitado?

PM: Ha tenido sus retos técnicos por motivos de distancia, pero siempre se ha logrado el diálogo y el intercambio de experiencias. Hemos formado alianzas importantes con cineclubes o cines independientes, pero la dinámica siempre es impredecible. 

SJC: También las distintas formas de apreciación y reflexión que tiene cada comunidad con un proyección o función, obtienes un abanico amplio de opiniones; de esta manera entendemos que un tema compartido, como la defensa del territorio, tal vez sea común en distintos lugares, aunque se vivirá de distinta manera. 

 

¿Cuál es el perfil del participante ideal que participa en “El lugar que habitamos”?

PM: No diría que exista un ideal, pero si nos interesa que todo realizador comunitario, cineasta indígena, y básicamente cualquier creador interesado en los problemas de las comunidades indígenas, se acerque con nosotros y comparta su trabajo o encuentre un espacio para dar a conocer su perspectiva. 

SJC: Lo importante es que estén comprometidos con una realidad de nuestro país y nuestros pueblos, que no haya manipulación de la información y los contenidos proyectados. 

 

La segunda edición del Festival de Radio y Cine Comunitario El lugar que habitamos se realizará en la ciudad de Oaxaca y otras comunidades del estado, del 14 al 22 de noviembre.

Todavía puedes participar: tienes hasta el 31 de mayo para presentar tu proyecto. Te compartimos las bases del Festival de Radio y Cine Comunitario “El lugar que habitamos”

Cortesía: Ojo de Agua

*Entrevista y redacción: Carlos Emmanuel Trejo.