'Fragmentos de olvido', de Rubén Villa: ciencia ficción queretana

¿Te gustaría moldear tus recuerdos? ¿Desechar vivencias dolorosas o incómodas, hacer más fuertes o luminosas las que te dieron alegría? ¿Recibir los recuerdos de otra persona con una vida mejor que la tuya, poblarte de su vida para ser más feliz?

Esto hace David, psicoterapeuta e investigador de la conciencia, quien ha conseguido modificar los recuerdos de las personas. Y experimenta con dos mujeres, Lucía y Sofía, quienes también se convierten en los amores de su  vida. La implantación de recuerdos les funciona como gran paliativo. También tiene sus riesgos: en la experiencia se juega, ni más ni menos, que la propia identidad.

Con un elenco que tiene al frente a la actriz María Aura, a quien acompañan talentos queretanos como Esteban Monry, Ili Huerta y Julieta Márquez, el cineasta Rubén Villa demuestra en Fragmentos de olvido que se puede realizar ciencia ficción con un tono íntimo y contenido. Entre Eterno resplandor de una mente sin recuerdos (Michel Gondry, 2004) o Las esposas de Stepford (Bryan Forbes, 1975) o novelas como Frankenstein o La invención de Morel, Villa propone una historia que va de lo onírico a lo amoroso, que también cruza el arte, el machismo, la recreación de parejas insólitas que sólo pueden explicarse desde las trampas o las revelaciones que contienen los recuerdos.

Fragmentos de olvido, cine de ciencia ficción queretano, tendrá su estreno mundial en el ficmonterrey. Tiene a Benuca Films e Isaac Ezban como productores. Su director, Rubén Villa, nos contó sobre esta aventura de la memoria y el inconsciente, que ocurre entre los sueños y  los autorretratos. 

 

Fragmentos de olvido, dir. Rubén Villa

¿Por dónde empiezas a hilar esta historia?

Siempre he amado la ciencia ficción y el género fantástico; mis primeros cortos han estado encaminados hacia estos géneros. A partir de ahí empecé a escribir la película. Me interesaba explorar el tema de la memoria: alterarla, implantar recuerdos en otros cuerpos. Era un cortometraje, pero después pensé que tenía que ser un largo. 

Iniciamos la escritura de guion con Víctor Cornejo, quien también produce la película. Antes se llamaba Episódica, por la memoria episódica. También surgió la idea de que podíamos hacer cine en Querétaro, con el presupuesto que teníamos. La ciencia ficción suele ser un género que puede costar muchísimo, pero teníamos la mentalidad de que era posible: nos enfocamos más en los personajes, en su historia, en la psicología de cada uno. 

La película es nuestra ópera prima y la hicimos desde la escuela de cine donde estudiamos: Arte 7, en Querétaro.  Fue nuestra tesis de carrera y se fue haciendo muy grande. 

 

El protagonista de Fragmentos de olvido me hacía pensar en referentes como Eterno resplandor de una mente sin recuerdosLa fuente de la vida, pero también en cosas turbias como Frankenstein o Las esposas de Stepford. ¿Qué me puedes platicar de él? 

El personaje principal, David, vive en autoengaño, que es un tema principal de la película: creerte algo que no eres, hacer cosas terribles y olvidar que las hiciste. Todo lo que olvidó regresa hacia él, entonces siempre vemos al personaje huyendo de sí mismo y dañando a las personas que se supone que ama, que en realidad no es amor, sino un apego gigantesco. 

Al final la verdad siempre sale a la luz, eso queremos mostrar. Toda esa falsedad de jugar con la memoria, de creer que eres algo pero no, nos lleva a la perdición. Y queríamos ver las consecuencias de alterar la memoria y omitir las cosas que no deberíamos borrar. Este personaje tiene una psicología densa, es algo macabro, pero lo vas descubriendo poco a poco. En el tercer acto te das cuenta de cómo es en realidad.

 

Los elementos de ciencia ficción que usas en Fragmentos de olvido son sobre todo dos, el artefacto que realiza la manipulación de la memoria y los juegos visuales que, según entiendo, hizo Emilio Ramos. ¿Cómo trabajaste con él? 

Emilio Ramos hizo los BFX de la máquina: hizo la pantalla y los modelos 3D de todos los elementos de la máquina. Las galaxias, las imágenes oníricas que vemos, las grabamos con un lente macro. Usamos elementos como leche, colorantes, alcohol, y adaptamos efectos para darle esa sensación onírica, pero también de galaxias. Me pareció propio del inconsciente. 

Los efectos nos remontan a la memoria, lo desconocido, lo abstracto, lo que está dentro de nuestra mente. También le metimos efectos de algoritmos de la máquina. Yo edité la película, entonces en edición les puse un efecto de espejos, de distorsión de lentes. Fui jugando también, un poco adornándolos. Fue un experimento divertido de hacer.

 

Tienes en tu elenco a cuatro personas importantes. Reconocemos a María Aura, conocemos menos a Esteban Monroy, Julieta Márquez e Ili Huerta. Platícame de ellos. 

Era muy importante encontrar a las personas indicadas, porque para mí los personajes lo son todo, por la película y por lo contenida que es. 

De María no tenía su contacto, pero era muy cercana a nuestra escuela y nos pasaron su contacto. Le mandamos el guión, le gustó mucho la historia y quiso subirse al barco. Esteban, Ili y Julieta son talento queretano: han hecho muchas cosas en el estado. Quisimos que el cast fuera cien por ciento queretano, porque teníamos opciones de otros actores de la Ciudad de México, pero quisimos darles la oportunidad, que se conozca el talento de la ciudad.

 

¿Cómo trabajaste con ellos? 

Todo fue confianza y tener una relación de respeto y cariño, porque surgió una amistad con los cuatro. Me encantó la química que tuvimos: la dedicación, la profesionalidad y lo increíbles que son. 

Revisamos juntos el guion, hicimos mucho trabajo de mesa antes y ensayamos bien las escenas. Hubo un un análisis intensivo de la historia de los personajes, de todo. Más que nada fue trabajo, por eso fluyó bien la relación entre director y actor, todos trabajamos como debíamos y lo hicimos bien.

 

Fragmentos de olvido, dir. Rubén Villa

 

Arte 7 funge como productora, pero también es el lugar donde han estudiado. ¿Qué es este espacio y cómo participó contigo para para hacer este proyecto?

Es una escuela de cine, pero también es productora. De ahí salimos todos. En el crew tuvimos 15 personas más o menos, todos compañeros de la carrera. En Arte 7, cada generación saca un largometraje a final de carrera; nosotros logramos la primera película queretana de la escuela, porque tiene una sede en Ciudad de México y otra en Querétaro.

 

Entre tus productores está Isaac Ezban, un referente importante en el cine de horror y fantasía. ¿Hubo algún intercambio con él? 

Nuestro contacto con Isaac fue desde nuestros productores Víctor y Fernanda, quienes fueron al Festival de Guadalajara y ahí encontraron a Fernando Montes de Oca, de Benuca Films, y le platicaron del proyecto; le pasaron la película. A Fer le gustó mucho y le dijo a Isaac: “mira esta película, creo que te va a gustar”. La vieron juntos y le gustó. Isaac es nuestro padrino de la película, ya la apadrinó, le gustó mucho.

 

¿Qué tan complicado es hacer cine en Querétaro? ¿Cómo es la escena cinematográfica allá?

Es difícil hacer cine en Querétaro, pero se está haciendo mucho. En los últimos dos o tres años se han producido cinco o seis películas queretanas, entonces está creciendo bastante, a pesar de que no hay una industria aquí, porque la industria está en la Ciudad de México. 

Es difícil, porque somos pocos, pero cada vez vamos siendo más. Es un esfuerzo muy grande, pero sí se están haciendo cosas.

 

¿Qué expectativas tienes de presentar Fragmentos de olvido en el ficmonterrey?

Espero que les guste mucho, que vean el talento que tenemos en Querétaro. También espero divertirme, pasármela bien: ver mucho cine y conocer gente que también ama hacer cine; aprovechar al máximo el festival. Es lo que quiero.

 

Fragmentos de olvido (México, 2024). Dirección: Rubén Villa. Guion: Rubén Villa, Víctor Cornejo. Producción: Fernanda Guerrero, David Oliver, Rubén Villa. Producción ejecutiva: Isaac Ezban, Fernando Montes de Oca. Compañía productora: Arte7, Invictvs Films, Bizzart Producciones,  Xibalba Films, Viva la Vida Films, Benuca Films, Red Elephant Films. Fotografía: Bryan Cuenca. Edición: Rubén Villa. Dirección de arte: Carolina Buenrostro. Sonido directo: Mabel Almodóvar. Diseño sonoro: Paco Méndez P, Juan Ortiz, Micky Sierra. Música: Alonso Alamán. Reparto: Esteban Monroy, María Aura, Ili Huerta, Julieta Márquez