‘Hasta que el alma baile’ de Karla D. Oceguera: el anhelo de la danza

Un grupo de mujeres baila en el parque. Alma las mira mientras saca a pasear a su perro. Alma también desgasta sus ojos en la noche, frente al celular, cuando revisa coreografías en las que le gustaría participar. Pero Alma debe atender a su madre enferma; su pasión por la danza se posterga en la asfixiante rutina de los cuidados.

Hasta que el alma baile es un cortometraje de Karla D. Oceguera, cuyo guión ganó en el concurso Nárralo en Primera Persona de 2021, convocado por el Imcine bajo el tema del confinamiento. Para contar esta historia, Karla se apoya con la actriz Teresa Sánchez y juntas crean un emotivo cuento sobre un entorno sofocante, y cómo la imaginación ayuda a escapar hacia esa zona donde las mujeres parece flotar mientras bailan

Hasta que el alma baile participa en la Sección Cortometraje Mexicano de la edición 27 del Festival Internacional de Cine Guanajuato. Platicamos con Karla sobre esta historia de anhelos y cuidados.

Este cortometraje parte de un guión que ganó el concurso Nárralo en primera persona 2021, cuando tuvo la temática del Confinamiento. ¿Ya tenías una historia o la creaste a partir de la convocatoria?

A partir de la convocatoria me puse a pensar qué quería contar, desde los parámetros que establecía. También desde antes venía pensando en hacer una historia sobre los cuidados que se le debe tener a un familiar enfermo.Justamente la convocatoria me ayudó a asociar estas ideas y encontrar mi historia. 

En tu cortometraje pasado, Hierbabuena, también tratas esta relación de protección a los adultos mayores. ¿Coincidencia o es un tema que te interesa explorar?

Parece que me obsesiona un poco.Aunque intento abordar otras cosas, siempre termino escribiendo sobre lo mismo, creo que es porque fui una niña que creció en un ambiente de adultos y siempre me esforcé por entenderlos.Al final siempre escribo sobre las relaciones interpersonales, eso es lo que me mueve. 

Puedo intentar hacer comedia o terror, y esa es la temática por la que me inclino. 

Hasta que el alma baile proyecta dos atmósferas distintas: una real, que muestra los cuidados con la madre; y otro de fantasía que ocurre cuando Alma ve los bailes y desea participar. ¿Cómo manejaste estos tonos?

Esperaba que el interior de la casa fuera más fría, encapsulada, justo esa era la temática del concurso de guionismo, el confinamiento de las mujeres, y en la realización del cortometraje también busqué esa frialdad.El exterior tuvo un desarrollo onírico, porque era una pulsión y en estas escenas la protagonista proyecta su deseo reprimido. 

La propuesta de cámara se logró en gran medida por nuestra directora de fotografía, Laura Miranda, con ella exploramos colores cálidos y fríos, distintos emplazamientos, manejamos los exteriores con cámara en movimiento y para el interior usamos cámara fija. Y creo que se logró la sensación.

Me sorprendió que participe en el cortometraje Teresa Sánchez, actriz importante en el cine de Nicolás Pereda, cómplice de Lila Avilés, que destacó protagonizando Dos estaciones de Juan Pablo González. Ahora tú trabajas con ella.

Es increíble, Teresa le da esencia a los proyectos. Creo que llegué con ella por mera intuición, porque escribí la historia pensando en ella e imaginando que en la historia debería aparecer alguien como ella. 

Tuve un poco de inspiración en la imagen de mi tía, al final investigué y supe que Tere vive en Morelia, Michoacán, y por medio de un grupo de cineastas de allá pude ponerme en contacto con ella. Desde que le mostré el guion se abrió bastante y recibió bien la historia. Parte de esa sensación y magia de la historia la otorga ella.

¿No inhibe trabajar con una actriz como ella?

Tere es una eminencia. Le expresé mi nerviosismo y al final te deja hacer tus locuras y se adapta. A pesar de que en el cine hay jerarquías, ella piensa de forma horizontal y busca la unión y el trato humano. Eso nos permitió compaginar de buena manera, compartíamos ocurrencias de nuestro pasado y siempre hubo mucha conexión. 

¿Qué retos te propone trabajar en el cortometraje?

Un corto te permite distintas cosas.Mi formación es como guionista y creo que te propone una estructura similar al chiste, donde hay una intro y al final un remate. Te deja explorar en varias temáticas y buscar la manera de plantear algo.Facilita a que la historia sea más concisa y en lo personal puedo explorar más en cuanto a la forma.Llega a un punto superior de lo que sería realizar un videoclip; siempre hay la oportunidad de plantear algo más complejo. 

¿Cuáles son tus expectativas de presentar tu cortometraje en el Festival Internacional de Cine Guanajuato?

Es una fortuna que ya pueda estrenarse en México, y sobre todo en Guanajuato. Ya se lo he mostrado a amigos y amigas, y casi siempre comparten experiencias cercanas, porque me dicen que les recuerda a alguna tía o abuela. Me llena de mucha emoción saber que se presentará con el público mexicano, ver cómo recibirán la historia. 

Hasta que el alma baile. México. (2024). Dirección: Karla D. Oceguera. Producción: Karla D. Oceguera, Victoria Acevedo. Compañías productoras: Brujazul. Guión: Karla D. Oceguera. Edición: Juliana Orea.Fotografía: Laura Miranda. Música: Rodrigo Dávila. Elenco: Teresa Sánchez, Marla Nuñez Mata.