‘Hay algo que no he dicho’, de Massiel Hernández: testimonios para entender el aborto

A partir de su experiencia como acompañante en diferentes procesos de aborto, la fotógrafa y directora originaria de Colima, Massiel Hernández, sigue de cerca la historia de Carmen, Melina y Fanny; tres mujeres que decidieron interrumpir sus embarazos, desafiando a una sociedad conservadora y a sus propias familias. 

 

La idea del cortometraje surgió en 2018, época en la que Massiel Hernández se unió a la lucha por legalizar el aborto. Aunque en un inicio tenía la idea de hacer un corto de animación, para proteger la identidad de las tres mujeres que brindan sus testimonios, al final prefirió un acercamiento más íntimo y emocional.

Hay algo que no he dicho no sólo muestra los diferentes contextos sociales y familiares a los que se enfrentan las mujeres cuando toman la decisión de no ser madres, también intenta conectar con el público, para generar conversaciones alrededor del aborto.

 

Hay algo que no he dicho forma parte del 37° FICG dentro de la competencia de cortometraje iberoamericano documental. Massiel Hernández nos contó sobre la realización de su cortometraje.

 

A ti te interesa retratar la historia de mujeres de tu pasado, ¿cómo fue que decidiste cambiar de tono a algo más coyuntural y hablar sobre el aborto?

En 2015 comencé a involucrarme más con el tema del aborto, principalmente porque mi madre siempre ha estado muy involucrada en el tema. Ese año me convertí en acompañante de mujeres y fue ahí donde conocí muchas historias, a partir de estos encuentros decidí hacer un cortometraje que abordara las historias de distintas mujeres que atravesaron por un aborto. 

Desde el inicio tuve claro que no quería tratar el tema desde el lado de la lucha social o desde un lugar muy panfletario, siempre me interesó abordarlo desde la intimidad y el sentimiento; además de reflejar el contexto que las rodeaba cuando decidieron hacerse el procedimiento.

 

Decidiste abordar el tema desde la intimidad e incluso hacer uso de elementos simbólicos, como esos fragmentos en animación que aparecen a lo largo de la película. ¿Por qué esta elección? 

Originalmente tenía la intención de hacer un cortometraje animado, porque quería mantener la seguridad y la privacidad de las mujeres que nos iban a brindar sus testimonios, también para evitar el morbo y los estereotipos con los que suelen juzgarse a las mujeres que se practican un aborto.

Pero cuando empecé a trabajar en la animación con Abril Márquez, sentí que me estaba limitando a nivel creativo. Al inicio de la pandemia decidí buscar otra forma de resolver el lenguaje cinematográfico.

Recuperamos  algunos fragmentos en animación que ya habíamos trabajado, buscamos que la narrativa fuera metafórica y así darle más intimidad a las historias, sin caer en lugares comunes, para que la atención se centrara en los testimonios de las mujeres.

 

En Hay algo que no he dicho tres mujeres que cuentan sus historias, ¿por qué las elegiste a ellas?

Lo que más me interesaba era poner sobre la mesa el contexto social y las condiciones a las que se habían enfrentado las mujeres al realizarse un aborto; condiciones que ponían en riesgo sus vidas. Eso me lo daba el personaje de Carmen. 

Después, la historia de Fanny, enfrenta una situación de pareja muy complicada: vive con un hombre más grande que ella y no desea tener otro hijo con él. Es una mujer que está buscando la fuerza para salir de su situación. 

Por último se encuentra Melina, quien trabajaba en la procuraduría y se cruza con una menor de edad que ha sido violada y con esta historia busqué mostrar cómo la sociedad criminaliza a las mujeres que deciden abortar, sin importar sus contextos o sus historias.

Todos los testimonios se escogieron para tratar diferentes temas alrededor del aborto, y más allá de abordar el procedimiento, quería reflejar los contextos complejos por los que atraviesan las mujeres en el país.

 

 

¿Cómo te ganaste la confianza de estas mujeres y cómo trabajaste con ellas?

Para ganarnos su confianza nos ayudó Citlally Vergara, actriz profesional que interpretó al personaje principal del cortometraje. Ella se animó a ser el hilo conductor que une todos los testimonios que aparecen en el corto, justo para englobar estas historias que se desarrollan en lugares y contextos diferentes.

Esta decisión de que Citlali Vergara fuera la protagonista también la tomamos porque dos de las mujeres que aparecen en el corto no se sentían muy cómodas al hablar del tema, a pesar de que sabían que no iban a salir sus rostros e íbamos a tener mucho cuidado. Como Citlali siempre tuvo mucha empatía con ellas facilitó el proceso y se ganó su confianza muy rápido.

 

Hay algo que no he dicho, Dir. Massiel Hernández

 

¿Crees que un trabajo documental como el tuyo contribuye para la lucha y los diferentes movimientos que buscan la legalización del aborto?

Mi intención es que el corto pueda abrir reflexiones y conversaciones sobre el tema. Espero que las mujeres activistas, que estamos al frente de diferentes movimientos, nos demos el espacio para escuchar diferentes historias y entender que cada mujer vive el proceso de manera diferente.

También quiero que el cortometraje pueda llegar a diferentes comunidades, porque hay muy pocas historias en México que aborden el tema del aborto, y las que existen lo tratan desde el drama o el morbo, así que creo necesario tener historias representadas desde otros lugares, porque finalmente el aborto es un acto y una decisión que las mujeres vivimos todos los días.

Espero que el corto pueda servir para otras organizaciones, ya sea como material de apoyo, punto de diálogo o para entablar conversaciones con personas que a lo mejor les cueste entender el tema.

 

*Redacción: Luis Felipe Maceda. 

Hay algo que no he dicho (México, 2022). Dirección: Massiel Hernández. Guión: Massiel Hernández, Abril Márquez. Producción: Massiel Hernández, Alejandra Cacho. Música: Chona Hernández Sonido: Gabriela Medina, Aldonza Contreras Castro, Alejandra Cacho. Fotografía: Massiel Hernández. Edición: Perlis López. Reparto: María “N”, Fanny “N”, Melina “N”, Citlally Vergara Olguín.