Su más reciente edición, de 2021, contempló 600 producciones, nacionales e internacionales, distribuidas en 12 secciones de competencia. A las secciones habituales se han unido otras como la de Pitching o Work in Progress, con el propósito de abarcar todos los procesos de la producción de cortometrajes.
Además, ha logrado alianzas con televisoras, plataformas y salas del circuito cultural mexicano, para crear un robusto programa de actividades, que mantienen al cortometraje en la mira del público durante todo el año, como Noches de Shorts México o la Gira Shorts México. Desde Shorts México Academy realiza conferencias y talleres con profesionales de la industria. También, las producciones presentadas en Shorts México pueden ser consideradas para el Premio Ariel, de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas.
Desde que hice mi tesis en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales me involucré mucho en el cine. La suerte me puso frente a El héroe, cortometraje dirigido por Carlos Carrera; quedé sorprendido al ver que en tan sólo cuatro minutos podía transmitir tantas emociones.
Después trabajé en el área de festivales internacionales del Instituto Mexicano de Cinematografía; a pesar de que se hacía una labor importante en la difusión de cine mexicano, no había espacios suficientes para el cortometraje. Ya existía una sección de cortos en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara, el Festival Internacional de Cine de Morelia siempre ha tenido una pantalla para cortometrajes mexicanos, o está el caso de Expresión en Corto, antecedente del Festival Internacional de Cine de Guanajuato.
Pero trabajando en el Imcine supe que había un festival en Tokio exclusivo de cortometrajes, donde le daban su espacio a cortos nacionales, asiáticos e internacionales; y lo único que hice fue tratar de replicar ese modelo en México.
Es complicado, cada año uno se tiene que reinventar, porque hasta entre cineastas o gente que estudia cine, creen que el cortometraje es un documental o no saben cuánto dura un cortometraje. A veces lo toman como un ejercicio escolar y no saben que es una forma de expresión con características propias. Yo siempre hago el símil entre el cuento y la novela, cada uno con sus características y su importancia.
Es complicado involucrar a la gente con el cortometraje, aunque es lo que más se produce ahora, con las nuevas tecnologías. Al interior de la república hay muchas historias que contar, que solo se puede hacer a través del cortometraje.
Shorts México ha cambiado las vidas y las carreras de las personas; directores que se presentaban con su ópera prima y han ganado algún premio o mención, y han pasado de ser actuarios, abogados o contadores, a convertirse en cineastas.
Es increíble ver cómo un cortometraje impacta en la vida del público, cómo conectan con las historias. La gente disfruta, se emociona y se conmueve en las salas, y sin duda esto nos lleva año con año a seguir con el festival.
Es importante tener un buen equipo, ahora cuento con alguien como Isaac Basulto, es productor pero también difunde el cortometraje y me ayuda con la programación del festival.
Hace 16 años comenzamos con competencia en 35 mm y video; nos dimos cuenta que no era suficiente una semana de festival y empezamos a crear Noches de Shorts México y la Cortoteca, para tener otra ventana de difusión.
Ahorita estamos todos los martes en Canal 22, hemos estado en TV Azteca, Capital 21 y Canal Once.
Nos da mucha satisfacción crear sinergias entre festivales, intercambiar cortometrajes y recomendar proyectos. Con la pandemia también encontramos espacios en plataformas como FilminLatino y tenemos un canal de YouTube en el que subimos cortometrajes constantemente.
Es importante el apoyo del gobierno local y federal, sin este impulso sería complicado realizar el festival cada año. Gracias a estos apoyos podemos publicar catálogos, en los que buscamos preservar la memoria del festival y de los cineastas.
Estos apoyos nos permiten llevar el festival a las 16 alcaldías de la Ciudad de México y su programación a todos los estados de la república. Eso nos da mucha satisfacción porque desde el inicio fue nuestro primer objetivo, que los cortos se vean en el interior de la república; que los cortos realizados en el interior también se vean en la Ciudad de México.
Somos el único festival exclusivo de cortometrajes, le damos espacio a la ficción, la animación, el documental y todas las temáticas. No toda la gente tiene la oportunidad de ir al Festival Internacional de Cine de Guanajuato, a Morelia o Guadalajara; en Shorts México intentamos llegar a todo el país y le damos al cineasta el espacio que necesita para exhibir sus proyectos, porque quizá otros festivales no tiene el espacio suficiente o tienen otras prioridades.
Se trata de seguir apoyando el cortometraje y continuar con la evolución del festival. Desde hace años estamos apoyando la escritura cinematográfica de cortometraje, en años más reciente comenzamos a apoyarlos con presupuesto para que varios cineastas hagan otro cortometraje.
Y desde el año pasado, gracias a los Estudios Churubusco, tenemos el premio Work In Progress, donde se le apoya con la postproducción. También tenemos una parte académica, impartimos conferencias, talleres y seminarios de todas las áreas cinematográficas; todas estás actividades están abiertas a todo público, de manera gratuita.
Con los cineastas que han ido al extranjero, pienso en Iñarritu, Cuarón y Del Toro, hubo un boom en las escuelas. Ellos y otros cineastas regresan al corto porque es una manera de expresión diferente. Directores como Fernando Eimbcke siguen trabajando el género, como en el proyecto Berlin I Love You. Hay muchos consagrados que hacen que las nuevas generaciones quieran expresarse más allá del ejercicio escolar, es un círculo virtuoso. Hay temas muy específicos, historias muy específicas, que solamente en cortometraje se pueden contar.
Shorts México ya prepara su edición 17. Conoce los detalles en el portal de Shorts México.