‘Un disfraz para Nicolás’ de Eduardo Rivero: aventuras distintas para niños distintos

Un disfraz para Nicolás es la nueva fábula de Fotosíntesis Media, casa productora interesada en crear entretenimiento con causa, y que ya había hecho El ángel en el reloj, película sobre el cáncer infantil. En este caso, Nicolás es un niño con síndrome de Down.

 

El problema empieza cuando la madre de Nicolás desaparece y él debe vivir con sus abuelos y un primo desesperante, porque está empezando a ser adolescente.

Eduardo Rivero dirigió esta historia llena de fantasías, aventuras y aprendizajes.

“La anterior película de Fotosíntesis trataba sobre cáncer infantil”, cuenta el director,  Eduardo Rivero. “A la mitad de la preproducción llegó a nosotros el libro Pablo y el baúl de Jaime Mijares. Lo leímos y pensamos que podía adaptarse a una película, y que con él podríamos abordar el siguiente tema, el síndrome de Down. Conforme empezamos a escribir la trama cambió mucho, por eso ya no tiene el mismo nombre, fue una adaptación libre hacia el tema que queríamos tratar".

 

Un disfraz para Nicolás participa en la Función para niños del 20° Festival Internacional de Cine de Morelia. Platicamos con su director, Eduardo Rivero.

 

Si no tengo llego al final a los créditos, no me entero que Nicolás es un niño con síndrome de Down, me parece una virtud cuando cuidan estos elementos, para que no sea lo más importante del personaje.

No quisimos hacerlo evidente, como en El ángel en el reloj nunca se menciona al cáncer infantil. No queríamos ser manipuladores o que cayera en un sentimentalismo forzado, sino que a través de los sueños y los miedos de Nicolás puedas conocerlo, que no exista el prejuicio desde que empieza la película.

 

Es importante que el doblaje lo haga un chico con síndrome de Down, Fran Fernández, ¿cómo fue la participación con él?

Gracias a Special Olympics fuimos a escuelas de educación especial y convivimos con muchos niños; a la mitad del proceso el productor y guionista Miguel Ángel Uriegas me propuso que uno de los niños hiciera la voz del protagonista. Como cineasta lo primero que piensas es resolverlo con actores profesionales, pero parte del reto de la película fue darle esa oportunidad a Fran Fernández, un niño maravilloso, lleno de energía. Su familia estuvo de acuerdo y en la sala de grabación, con la ayuda de la directora de doblaje Gaby Cárdenas, que además es psicóloga infantil, comenzó a trabajar Fran y a los pocos días empezó a tener mucha confianza. Ya no era el tema si lo podía lograr, sino cuál toma era la mejor. Eso nos dio una lección grande, porque teníamos ese temor de probar algo distinto, y también fue importante para Fran, que nunca había hecho algo parecido. Estamos satisfechos y sorprendidos con el resultado, al final de la película quisimos dejar en los créditos un pequeño testimonio de ese proceso.

 

A pesar de que es una película alegre y llena de colores, en el fondo tiene su elemento trágico, hay mucha elegancia para abordarlo

Es a través del tono y del aspecto. Si ves el arte todo parece estar dibujado con crayolas, lápices de color, muy artesanal, pareciera que estás hojeando un cuento infantil. Fue la manera de suavizar esta parte, que también viene desde el guión. Creo que como nos dirigimos a los niños, ellos aceptan este contexto más rápido; si lo ves como adulto de inmediato te pega.

 

Nicolás parece un personaje manga; a partir de ahí me quedó la duda de cómo trabaja un animador sus influencias. ¿Hay algún estudio o estilo de animación que sea referente para Nicolás?

Nicolás tiene un poco de todas las cosas que nos encantan. Dicen que nuestra Casa Caminante se parece mucho a El castillo vagabundo, lo cual es una coincidencia agradable, somos fans de Studio Ghibli y fue sorpresivo porque en realidad pensábamos en una leyenda rusa, de una cabaña que tiene patas de pollo. Al final no es que quisiéramos ir directamente sobre El castillo vagabundo, tiene otras cosas de películas que me gustan y de lo que ha hecho importante al cine animado.

 

Un disfraz para Nicolás, Dir. Eduardo Rivero

 

El interés de Fotosíntesis Media es hacer entretenimiento con causa; El ángel en el reloj trata sobre el cáncer infantil y Un disfraz para Nicolás tiene el tema del síndrome de Down, son temas fuertes para un público infantil

Estos temas siempre quedan del lado porque a lo mejor son incómodos de ver, pero creemos que es importante generar esta conciencia desde antes, no sólo cuando eres adulto, que ya estás predispuesto. Tratamos de buscar empatía con la gente, nos hace falta como seres humanos ponernos en los zapatos de la otra persona.Si podemos lograr eso, el esfuerzo vale la pena.

 

¿Qué nuevos proyectos hay para Eduardo y para Fotosíntesis Media?

Ahora estoy codirigiendo con Miguel Ángel Uriegas la siguiente película, sobre la migración. Todos los proyectos son un reto, cosas que no habías hecho antes, la variedad de estilos te enriquece muchísimo para tu trabajo, así que eso es lo que está por delante para nosotros.

 


Un disfraz para Nicolás. (México, 2020). Dirección: Eduardo Rivero. Guion: Miguel Ángel Uriegas. Música: Manuel Vázquez. Reparto: Fran Fernández, Paty Cantú, José Lavat, Emiliano Ugarte, Magda Giner.